Según tu color de piel
Pero ten una cosa clara, un cabello coloreado exige un plus –y muy grande- de cuidados. A continuación, te damos las claves, consejos y trucos para que tu decisión tenga siempre el mejor resultado Para los estilistas de la firma experta en coloración Wella la idea general es bastante simple: “A las pieles claritas le van mejor todos los tonos cálidos para el cabello: rojos, cobrizos, rubios y dorados son sus mejores opciones.
Para las que tiene el color de los ojos en tonalidades azules, verdosas o en marrones claritas, la elección mejor será también elegir una coloración en colores claros y luminosos, sin embargo, las mujeres de ojos oscuros, de negro a marrón profundo, se encontrarán más favorecidas con tonos más fuertes e intensos.
Las pieles de carnación media o más bien tirando a morenas, la mejor elección estará entre las distintas tonalidades de negro y los tonos violáceos, porque aportan mucha personalidad en los peinados.
Según la forma de tu rostro
Sin lugar a dudas, otra de las cuestiones que han de tenerse en cuenta a la hora de darle color al cabello es la forma del rostro, como si, desde luego, existe rasgo excesivo.
Cara afinada. Tienen que concentrar los rayitos o mechas a los laterales de la cara, mientras que en la parte superior de la cabeza, tienen que estar más escasos.
Cara cuadrada. Las tonalidades de las mechas han de ser casi imperceptibles para que solo den un poco de luz y profundidad al tono del cabello y tienen que ser muy finitas concentrándose en la zona superior de la cabeza y, si se lleva, en el flequillo.
Cara redonda. Las mechas se escogerán en al menos dos tonos más oscuros que el tono del cabello y se pondrán a los lados para dar la sensación de un rostro más delgado.
Nariz grande. Si es el rasgo predominante en la cara, un flequillo bien iluminado en tonos calidos o con mechas claritas hará que se concentren las miradas más arriba.
Para las de frente pequeña. Aplicar mechas en tonos luminosos que destaquen en la zona de ambos laterales.
Papada. Para intentar que pase lo más desapercibida posible, lo más conveniente es cortar el pelo al ras de los hombros, con desfilado en los lados y hacerse una iluminación a base de mechas o rayos en la parte superior del cabello
Look natural
Para quién: si eres de las que sueñan con una melena que parece realmente tuya, sin ayudas exteriores, y quieres que tu pelo parezca recién salido de un baño de sol con reflejos dorados y miel super naturales y muy favorecedores
El secreto del éxito reside en mechas muy finas, reflejos hechos con peine que dan un resultado muy luminoso, o lo que es lo mismo, la técnica conocida como 'balayage'. Dicen los expertos que basta trabajar un 40% del cabello y mantener el resto con tu color natural.
Mantenimiento:
Depende de lo perfeccionista que seas. Normalmente basta con visitar a tu peluquero una vez cada dos meses para retocar la raíz, potenciar la luminosidad y someterte a un tratamiento de hidratación puntero.
Color total
Para quién: si no te conformas con medias tintas, si eres de las que piensa que hay que arriesgar cueste lo que cueste y te apasionan los continuos cambios de look.
Protocolo: la coloración total está de moda, es tendencia ya que combina perfectamente con los nuevos cortes y estilismos de esta temporada. Perfecto para cabello a lo ‘Bob’ y flequillo tupido. Sólo hay que saber que tono va mejor con nuestro color de piel y adaptar el maquillaje, tus colores fetiches de armario y tu estilo a la nueva apuesta cromática.
Mantenimiento: dependiendo de tu color natural, necesitarás retocarlo cada 4 o seis semanas. Afortunadamente se tarda mucho menos en retocar sólo las raíces.
Consejos de expertos
Si es la primera vez que te sometes a una coloración deberías hacerte un test de alergia 48 horas antes de la aplicación del tinte. La piel de la nuca es un buen sitio. Si no hay enrojecimiento o picor, adelante.
Si dudas entre varios tonos, Christophe Robin creador-colorista de L’Oréal Paris aconseja que tengas siempre en cuenta tu tipo de cabello, tu tono de piel y el color de los ojos. “El cabello debe quedar dos tonos más claro o más oscuro que nuestro color de piel”.
Si tienes la piel rosada, Christophe propone huir de los tonos rojizos y apostar por los matices de color beige.
Sigue escrupulosamente las instrucciones del fabricante y los tiempos de exposición, no te saltes ningún paso y no mezcles varios colores. Eso déjaselo a los profesionales.
Empieza siempre por la frente y los laterales (patillas y sienes). Recuerda que esa es la parte más expuesta y la que menos errores admite.
Aunque la mayoría de las coloraciones son de aplicación fácil, limpia y no gotean, ponte siempre una toalla sobre los hombros.
Antes, durante y después usa productos capilares específicos para cabellos coloreados. Mantendrás por más tiempo el color, el brillo, la hidratación y la suavidad.
Fuente: Terra-Mujer