Hasta hace no muchos años, las mujeres mayores de 40 años se veían mucho mas grandes de lo que las “cuarentonas” de ahora nos vemos hoy en día. Esto, sin lugar a dudas, tenía mucho que ver con prejuicios sobre que ropa era “permitida” o no ponerse después de cierta edad.
Cuando pasas de los 40 años, tu cuerpo no se ve más como lo hizo en tus veintitantos o treinta y tantos, pero eso no significa que se vea peor … ¡de hecho muchas son las mujeres se ven mas atractivas en sus cuarentas de lo que nunca antes se vieron!
Pero si bien puede ser que estés más delgada y en mejor forma gracias a la dieta, el yoga y las sesiones en el gimnasio que han sido parte de tu rutina diaria los últimos diez años, es necesario que uses tu sentido común cuando compres ropa nueva. A fin de cuentas: no es lo mismo “los tres mosqueteros que veinte años después”.
Mantén un estilo propio
Una ventaja de ser “cuarentona” es que a estas alturas ya sabes bien lo que te queda y lo que no, y muy probablemente tengas un estilo bien definido.
Si tu estilo tiende a ser más bien informal, cuando cumples los 40 no es el momento de cambiarlo, pero quizás si de adaptarlo un poco. “Casual” no es sinónimo de “fachoso”, y la última cosa que quieres ser es una “mujer de mediana edad pandrosa o desaliñada”. Por lo tanto, echa a la basura esos viejos jeans rotos y los pants que heredaste de tu marido y búscate un par de pantalones de mezclilla que se ajusten bien a tu silueta y que saquen a relucir tus mejores cualidades.
Pero, por favor, olvídate de esos jeans vaqueros super pegados (los llamados “skinny jeans”), aun si tienes un perfecto trasero ¡ese tipo de pantalones solamente se le ven bien a tu hija adolescente!
Si tu estilo tiende a ser más bien informal, cuando cumples los 40 no es el momento de cambiarlo, pero quizás si de adaptarlo un poco. “Casual” no es sinónimo de “fachoso”, y la última cosa que quieres ser es una “mujer de mediana edad pandrosa o desaliñada”. Por lo tanto, echa a la basura esos viejos jeans rotos y los pants que heredaste de tu marido y búscate un par de pantalones de mezclilla que se ajusten bien a tu silueta y que saquen a relucir tus mejores cualidades.
Pero, por favor, olvídate de esos jeans vaqueros super pegados (los llamados “skinny jeans”), aun si tienes un perfecto trasero ¡ese tipo de pantalones solamente se le ven bien a tu hija adolescente!
fuente: 40ymas.com